A las personas encargadas de supervisar recursos humanos en una gran empresa les resulta difícil determinar si un empleado está siendo honesto cuando se enfrenta a una baja por enfermedad. Asimismo, no es función de los supervisores de empresa vigilar al trabajador en sus actividades diarias fuera de la empresa, hasta el punto de invadir su vida privada.
Sin embargo, existen algunos indicios que podrían demostrar una baja laboral fingida del trabajador. A continuación te indicamos algunos de estos:
¿Qué es el trastorno de ansiedad?
El trastorno de ansiedad es una condición en la que las preocupaciones, los miedos y las aprensiones no desaparecen, al contrario, pueden aumentar con el tiempo, volverse constantes y por lo general no tener una causa visible.
Como cualquier condición, el trastorno de ansiedad debe ser diagnosticado por un profesional médico. Pero hay síntomas que pueden guiarte y alertarte para buscar ayuda profesional. Algunos de estos síntomas son:
¿Cuál es la diferencia entre exhausto y cansado?
¿Cómo se puede demostrar que un paciente miente cuando dice que tiene un problema cognitivo, como problemas de memoria, concentración o ansiedad? Hay muchas personas que exageran sus lesiones e incluso las fingen para recibir más dinero de aseguradoras u obtener bajas por enfermedad, según una investigación pionera en España. Esta investigación ha sido realizada en el Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la Universidad de Granada por la Dra. Raquel Vilar López. Las conclusiones de su estudio, centrado en pacientes que sufrieron traumatismos craneoencefálicos, hablan por sí solas: casi la mitad de las personas que acuden a los juzgados fingen trastornos psicocognitivos con el fin de lucrarse de alguna manera. No son hipocondríacos ni pacientes excesivamente ansiosos u obsesivos, simplemente mienten para recibir algún tipo de compensación, como dinero. Se les llama “simuladores”.
Hasta ahora, en España no existía un sistema fiable para detectar si una persona estaba fingiendo sus síntomas. Por eso es tan importante el estudio de Vilar López, coordinado por Manuel Gómez Río y Miguel Pérez García: por primera vez, los profesionales sanitarios españoles disponen de un conjunto de herramientas fiables para demostrar empíricamente si un paciente miente cuando declara, por ejemplo, que sus problemas de memoria le impiden trabajar.