Los gatos son criaturas complicadas y mucho más impredecibles que, digamos, los perros. Pero es importante reconocer si un gato está estresado, especialmente durante períodos prolongados, ya que este estado puede tener implicaciones más profundas para su salud. Por ejemplo, puede aumentar el riesgo de problemas del tracto urinario, una de las debilidades de muchos gatos.
Cómo reducir el estrés en los gatos
Si tu gato es susceptible al estrés o la ansiedad frecuentes, existen algunos trucos para que tu minino esté lo más feliz y tranquilo posible. Nuestros favoritos son:
- Dale un espacio seguro. A los gatos les gusta descansar en lugares altos, como una cama con radiador, o en una cama iglú donde puedan esconderse.
- Cambios graduales. Si llega un nuevo animal a la casa, haz las presentaciones lenta y pacientemente. Una de las peores cosas que puedes hacerle a tu gato es presentarle a un extraño y dejar que se las arregle solo. Si lo haces de esta forma aumentará el estrés tanto para el gato que ya vive en casa como para el recién llegado. En su lugar, separe al nuevo amigo en una habitación y déjelo acomodarse mientras su gato olfatea e investiga.
- Establece una rutina. Por lo general, a los gatos les gusta que su comida y agua estén siempre en el mismo lugar y que coman a la misma hora todos los días. Esta regularidad también ayudará a tu sistema digestivo.
- Mantén limpio el arenero. Una caja de arena sucia puede causar muchos problemas, como salir a la calle. Si tienes más de un gato, es recomendable tener una caja de arena por gato y colocarlas en diferentes partes de la casa si es posible.
Feromonas
Si las soluciones anteriores no han funcionado, puedes recurrir a las feromonas, que no son más que sustancias químicas segregadas por el animal que lo hacen sentir feliz. Existen difusores naturales que expulsan gradualmente estas sustancias y que se pueden colocar en las habitaciones donde vive el gato para que se sienta mejor. No te asustes, no le hará daño al minino, pero como te hemos dicho antes, lo mejor es que consultes directamente con tu veterinario si tienes alguna duda.