Otro de los síntomas iniciales de la ansiedad es bostezar con más frecuencia de lo normal. Hay un estudio de la Universidad de Bournemouth (Inglaterra) que lo corrobora. Según esta investigación, las personas bajo estados de ansiedad, miedo o pánico tienden a bostezar con mayor frecuencia.
El estudio reveló que existe una relación directa entre el número de bostezos y la producción de cortisol, la hormona del estrés. Cuantos más bostezos, mayor será la cantidad de cortisol. Esto se debe a que el cortisol aumenta la temperatura corporal. Bostezar, por su parte, contribuye a bajar la temperatura.
Puede haber muchas razones por las que puedes sentir ese sabor metálico en la boca, la mayoría de ellas inofensivas. Muchas de las causas del sabor metálico en la boca suelen ser temporales y no representan un peligro grave, siendo el sabor más desagradable e incómodo que la amenaza que representa para el organismo.
No suele ser un problema recurrente ni crónico, ya que desaparece espontáneamente. En muchas ocasiones está provocada por algunos medicamentos, pero también es posible que sea síntoma de una patología más grave.
¿Qué tan severa es tu ansiedad?
El sabor metálico debido a la ansiedad es raro, pero puede ser causado por una ansiedad severa.
No todo el mundo se preocupa cuando siente un sabor metálico en la boca, la mayoría de la gente no se da cuenta ni se preocupa por lo que puede ser. Las personas que sufren ataques de pánico o ansiedad por la salud suelen ser las que más se preocupan.