Al igual que años anteriores, 2020 comenzó con una nota de esperanza. El número -2020- en sí mismo fue inspirador, sugiriendo una claridad y agudeza visual óptimas. La pandemia de COVID-19 y los recientes disturbios civiles han cambiado la vida cotidiana, poniendo a prueba nuestra resiliencia. No sabemos cómo vamos a vivir la ‘nueva normalidad’. Durante la nueva normalidad estaremos de luto por las vidas, momentos y oportunidades perdidas. Pero con suerte, la nueva normalidad también traerá una nueva apreciación por la conexión, la libertad de hacer las cosas que disfrutamos, el toque humano e incluso la tecnología. Esperamos que la nueva normalidad esté llena de esperanza por la igualdad, la empatía y el diálogo sobre lo que nos une para superar lo que nos divide. Aunque no siempre podemos evitar o eliminar el sufrimiento y el dolor, podemos practicar la empatía y escuchar para comprender y no para estar de acuerdo. Podemos intentar tener conversaciones incómodas que lleven a la comprensión y al amor. Podemos trabajar para encontrar nuestra propia voz y luego usarla para cultivar la esperanza y el amor.
¿Qué es la Ansiedad?
La Organización Mundial de la Salud estima que una cuarta parte de la población que acude a una consulta solicitando asistencia médica presenta síntomas típicamente ansiosos.
Todo ello no sólo justifica sino que requiere una especial consideración y tratamiento de la ansiedad en Málaga.
¿Se puede evitar?
Las personas vivimos experiencias que nos pueden causar malestar y pueden ser adaptativas, tanto física como psicológicamente. Son aquellos malestares que se manifiestan de forma psíquica y somática, pero que no son aislados, sino que están permanentemente conectados a las características de nuestro entorno.
El problema aparece cuando los malestares ya no actúan como mecanismos adaptativos o estabilizadores, sino que aparecen en todas nuestras situaciones y circunstancias sin llegar al punto. Es un gran problema porque, si el motivo del malestar tiene que ver con todo lo que nos rodea, sentiremos que este sentimiento no tiene fin y al final se generalizará.