La hiperventilación es un fenómeno respiratorio que suele aparecer en personas que sufren ataques de pánico. Generalmente, la hiperventilación produce una serie de consecuencias en nuestro organismo que pueden resultar bastante desagradables e incluso alarmantes si no se sabe a qué se deben. Pero como veremos a continuación, no es un fenómeno peligroso.
¿Qué es respirar?
Dolor de cabeza
Para algunas personas, los bajos niveles de oxígeno también causan dolores de cabeza periódicos. Por lo general, vendrán junto con otros síntomas, como dificultad para respirar, fatiga y confusión. En muy raras ocasiones, este síntoma se desarrollará por sí solo. También se debe tener en cuenta, que un dolor de cabeza causado por hipoxemia reaccionará a los medicamentos antiinflamatorios como el ibuprofeno y el paracetamol, como cualquier otro dolor de cabeza, pero estos medicamentos no remediarán la saturación de oxígeno en la sangre, solo este síntoma de falta de oxígeno en la sangre. particular.
Si experimenta estos síntomas, debe contactar a un médico de inmediato, ya que la hipoxemia en sí misma puede ser un síntoma de problemas graves como enfermedad pulmonar obstructiva crónica (enfisema o bronquitis crónica), enfermedad pulmonar, enfermedad cardíaca no diagnosticada o asma. .
¿Por qué los ataques de pánico pueden ocurrir por la noche o mientras dormimos?
Es una pregunta recurrente. Por la noche, relajados, somnolientos o incluso cuando nos despertamos en medio de la noche. ¿Por qué pasó esto? Existen varias causas para que esto suceda, siendo la principal la ausencia de estímulos que compitan por nuestra atención. Seguro que has experimentado esas pequeñas diferencias que suceden de la noche a la mañana. El volumen de la TV que durante todo el día fue necesario para tus necesidades ahora está “demasiado alto” esto se debe a que no existen otros estímulos que compitan con ese sonido. Algo similar nos sucede durante la noche en la cama, la ausencia de sonidos hace que prestemos atención a nuestro cuerpo y el «volumen» de nuestras propias sensaciones es mayor.
Otra causa común son los sueños. En estado de somnolencia, muchas veces, no somos conscientes de haber soñado durante un breve periodo de tiempo. Es posible que nos quedemos dormidos unos minutos y que nuestro cuerpo pueda mantener las sensaciones de ese sueño y estas nos lleven a estar muy activados. Una vez que recuperamos la conciencia y notamos esta activación repentina, comenzamos a preocuparnos. Si le sumamos al punto anterior (la ausencia de estímulos distractores) tenemos un cóctel perfecto para desencadenar un ataque de pánico.