En conclusión, la vida de la persona se ve afectada desde diferentes perspectivas y su bienestar se ve mermado por la disfagia. Afortunadamente, la colaboración de varios profesionales (médicos, logopedas, psicólogos…) puede ayudar a la recuperación.
Generalmente, las intervenciones irán encaminadas a proponer ejercicios vocales o estiramientos para el control muscular, pudiendo incluso recomendarse una dieta adaptada, en estadios iniciales, para ayudar a la persona a progresar progresivamente.
Mantener un ambiente húmedo.
Podemos utilizar un humidificador, sprays o neblinas, sobre todo si vivimos en una región de clima seco.
La humedad favorece la ventilación nasal. Es importante mantener los humidificadores limpios y en buen estado siguiendo las instrucciones de uso.
Dependiendo del color, olor o mera sugerencia, podemos generar más rechazo a ciertos alimentos
Tener la sensación de que la comida se puede atascar en la garganta al tragar se vuelve bastante insoportable y amenazante para algunos gente. La sensación es que la garganta no da paso a la comida como suele ocurrir. La ansiedad se manifiesta con frecuencia como un aumento de la tensión muscular en los hombros, la espalda y la mandíbula. En el caso de dificultad para tragar, la tensión se concentra especialmente en la garganta, y tiende a crecer a medida que se aumenta la atención en esta zona. Asociados a la disfagia también son frecuentes los episodios de ronquera por exceso de tensión en las cuerdas vocales. Cuanto más asustada esté la persona de poder asfixiarse, es más probable que desarrolle fagofobia.
Algunas personas son más sensibles que otras a la hora de rechazar alimentos por color, olor o mera sugerencia. Naturalmente, puede ser más difícil tragar algunos alimentos. Según el nivel de miedo y de alerta, pueden presentarse náuseas o vómitos. Cuando creemos que un alimento puede causar un problema para nuestra salud, el rechazo es automático y nos ayuda a protegernos de una posible intoxicación. Desde un punto de vista evolutivo, este rechazo protege contra intoxicaciones y enfermedades. El inconveniente es que cuando el bloqueo de la glotis se produce por mera sugestión, puede causar problemas, dejando de ser un mecanismo útil.