Todos nos preocupamos por algunas cosas en nuestra vida diaria, eso es normal. Una preocupación excesiva por muchas cosas, sobre todo cuando tenemos claro que otras personas no se preocupan tanto por esas mismas cosas, puede darnos una pista de que esta preocupación puede ser anormal. Si la preocupación es por una situación concreta que nos produce mucho miedo, es posible que el diagnóstico más adecuado sea el de trastorno fóbico o agorafobia. Si la preocupación está relacionada con un ataque al corazón u otro problema de salud grave e inminente, eche un vistazo al trastorno de pánico. Si la inquietud está relacionada con cambios recientes en su vida, puede ver la información relacionada con el trastorno de adaptación. Si son preocupaciones que te parecen absurdas, puedes leer el artículo sobre el trastorno obsesivo-compulsivo. Si la inquietud está relacionada con algún trauma grave que haya sufrido, consulte el artículo sobre estrés postraumático.
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¿La ansiedad provoca pensamientos irracionales?
Una de las principales características de la ansiedad es el aumento de la activación, tanto a nivel cognitivo como físico.
Si crees que puedes necesitar ayuda, en Psíntesis Psicología estamos a tu disposición. Infórmate de nuestros servicios de terapia psicológica y tratamientos de ansiedad.
Detiene los pensamientos negativos
Aplazar o frenar nuestros pensamientos negativos evitará que nuestras emociones se vean afectadas y nos sentiremos más seguros. Habla contigo mismo y haz que tus pensamientos negativos desaparezcan.
Evitar una situación que nos asusta no es la solución. Lo mejor es exponerse poco a poco, ya que el miedo irá disminuyendo poco a poco. Enfréntate a pequeños desafíos para superar tus miedos más profundos.