El Instituto Nacional de la Seguridad Social establece el tiempo estándar de incapacidad para cada diagnóstico:
- En los trastornos de ansiedad por condición fisiológica conocida, el tiempo de incapacidad es de 60 días.
- Para los trastornos de ansiedad fóbica sin un origen específico y para los trastornos de pánico sin agorafobia, el permiso estándar es de 45 días.
- En el trastorno de ansiedad generalizada y otros trastornos de ansiedad especificados o no especificados, el permiso puede ser de 30 días.
- Para el trastorno adaptativo con ansiedad, o con ansiedad y depresión, el tiempo estándar es de 15 días.
Requisitos para darse de baja por ansiedad
Los elementos que definen la situación de incapacidad temporal por ansiedad son:
- Situación de enfermedad: ansiedad.
- La necesidad de recibir asistencia sanitaria de la Seguridad Social.
- La incapacidad para trabajar.
Claves del Nuevo Régimen Laboral de las Trabajadoras del Hogar
Si pasado ese tiempo se considera que no hay posibilidad de recuperación, se le citaría ante un Juzgado de Medicina para el reconocimiento de la incapacidad permanente. La licencia médica se denomina formalmente incapacidad temporal. Para empezar, la baja por depresión (que puede estar motivada por ansiedad y/o agobio) tiene un máximo de 12 meses consecutivos. No obstante, si el médico de familia o el médico de la mutua considera que debe prorrogarse, puede prorrogarse otros 6 meses. Si después de estos 6 meses “extra” el trabajador continúa incapacitado, el caso debe ser estudiado por un Tribunal Médico y se le puede otorgar incapacidad permanente. En España, el trastorno de ansiedad es uno de los problemas médicos mentales más frecuentes.
La ansiedad daña a personas de todas las edades y condiciones, y puede ser muy incapacitante y tener un impacto difícil en la calidad de vida. En España, según la Ley de Prevención y Protección Laboral, una persona con ansiedad puede ausentarse del trabajo hasta 90 días al año. Esto se debe a que se cree que la ansiedad es una patología laboral, que requiere tiempo para volver a su estado normal. Estos días se pueden acumular durante todo el año, aunque no se pueden acumular más de 90 días por año. Cuando un trabajador siente ansiedad, y esta le empieza a influir negativamente no solo en su historia privada sino también en su trabajo, debe acudir a su médico de familia para un análisis y un diagnóstico adecuado.